Siguiendo estos consejos y trucos, puede asegurarse de seleccionar una sandía dulce y jugosa que satisfaga sus papilas gustativas. Sigue leyendo para aprender Cómo elegir una buena sandía!
El primer paso para recoger una buena sandía es levantarlo y verificar su peso. Una sandía madura debe sentirse pesada para su tamaño, lo cual es una buena indicación de que está llena de jugo y ha madurado adecuadamente.
Si la sandía se siente ligera o hueca, puede estar bajo rodeos o demasiado maduras, y la carne en el interior puede estar seca o insípida. Al levantar la sandía, asegúrese de usar ambas manos y levántala desde el fondo, ya que esto le dará una mejor idea de su peso.
Una buena sandía tendrá una forma simétrica, lo que significa que debe ser redondo u ovalado sin grumos ni protuberancias.
Evite las sandías que son deformadas o tienen irregularidades, ya que pueden no estar maduras o que podrían haber sido dañados durante el proceso de crecimiento. Una forma uniforme indica que la sandía ha crecido uniformemente y ha alcanzado la madurez.
Otro consejo importante para elegir una buena sandía es verificar el lugar de campo. El punto de campo es el área de la sandía que descansaba en el suelo mientras crecía.
Una sandía madura debe tener un punto de campo cremoso de color amarillo o naranja, lo que indica que ha tenido suficiente tiempo para madurar al sol. Si el punto de campo es blanco o verde, puede significar que la sandía aún no está madura o se recogió demasiado temprano.
Además, asegúrese de que el punto de campo no sea demasiado grande o demasiado pequeño, ya que esto podría ser una indicación de una sandía demasiado madrugada o inferior.
Otro consejo importante para elegir una buena sandía es inspeccionar el color de su piel. Una sandía madura generalmente tendrá una piel verde oscuro que es opaca y no brillante.
Busque rayas o marcas en la piel, ya que pueden ser un signo de maduración adecuada. Evite las sandías con una piel brillante o de color claro, ya que pueden no estar completamente maduras.
Sin embargo, tenga en cuenta que algunas variedades de sandía tienen un color de piel más claro, por lo que es importante conocer la variedad específica que está buscando.
La técnica de tapping es una forma popular de determinar si una sandía está madura o no. Para usar este método, toque suavemente la sandía con los nudillos y escuche un sonido profundo y hueco.
Si el sonido es opaco o plano, podría significar que la sandía está inferior o demasiado.
Verifique la firmeza de la sandía presionándola suavemente. Una sandía madura debe sentirse firme pero no dura, con una ligera regla cuando lo presiona.
Si la sandía es demasiado suave o blanda, puede estar demasiado madura o incluso malcriada. Evite las sandías con manchas o contusiones blandas, ya que pueden indicar daños o descomposición.
Una forma de detectar una sandía dañada o malcriada es buscar manchas de color oscuro en su piel. Estos puntos pueden ser un signo de hematomas u otro daño que ocurrió durante el transporte o el almacenamiento.
Si bien algunas manchas pequeñas pueden no afectar la calidad de la fruta, los puntos más grandes o más numerosos podrían indicar un problema.
Otro signo de una sandía malcriada es la carne empapada de agua. Esto puede ocurrir cuando la sandía ha estado sentada en un ambiente húmedo o húmedo durante demasiado tiempo.
La carne puede parecer suave o blanda, y puede haber gotas de agua visibles en la superficie.
Un grupo objetivo es un grupo de manchas pequeñas y oscuras que pueden aparecer en la superficie de una sandía. Esto es causado por una infección por hongos y es una señal de que la fruta está estropeada.
Evite cualquier sandía con un grupo objetivo, ya que la infección puede propagarse rápidamente y afectar toda la fruta.
La lesión del gusano de la corteza es un tipo de daño causado por larvas de insectos que se alimentan de la corteza de sandía. El daño puede aparecer como agujeros o túneles pequeños e irregulares en la superficie de la fruta.
Si bien este tipo de daño puede no afectar la calidad de la carne, puede ser un signo de otros problemas y debe evitarse.
Las manchas internas de la corteza son manchas marrones o negras que aparecen dentro de la sandía. Estos puntos son causados por una infección por hongos y pueden indicar que la fruta está estropeada.
Corta la sandía antes de comprar para verificar si hay puntos de corteza internos.
Un olor agrio o picante es una señal segura de que una sandía está estropeada. Si detecta algún olla inusual proveniente de la sandía, evite comprarlo.
Una sandía madura debe tener un olor dulce y afrutado, por lo que los olores desagradables deben ser motivos de preocupación.