Las plantas de Zinnia son plantas florecientes anuales coloridas que son fáciles de cultivar y cuidando. Cultivo de zinnias en macetas puede ser una excelente manera de agregar color y belleza a su balcón y otros rincones pequeños de la casa.
Las plantas de Zinnia son flores anuales coloridas que vienen en una amplia variedad de colores, incluyendo rojo, rosa, amarillo, naranja y morado, y pueden crecer hasta 2-4 pies de altura. Son una opción popular para los jardineros, ya que estas flores atraen polinizadores como mariposas y abejas. Las plantas también son excelentes para cortar y usar en arreglos florales.
Las zinnias prefieren el sol pleno y el suelo de drenaje y deben regularmente. Con el cuidado adecuado, las zinnias pueden florecer durante todo el verano y al otoño, proporcionando una hermosa explosión de color a cualquier jardín o en interiores.
Hecho: Es una de las flores más duraderas del mundo!
Para Cultivo de zinnias en macetas, Puedes propagarlos usando esquejes de semillas y tallo. El mejor momento para propagar Zinnias es a principios de la primavera, cuando las noches aún son frescas, pero los días se están volviendo más cálidos.
Para Cultivo de zinnias en macetas, Considere el tamaño de la planta y su sistema raíz. En general, una maceta con un diámetro de 8-12 pulgadas y una profundidad de 8-10 pulgadas es adecuada para una sola planta de Zinnia.
A medida que la planta continúa creciendo, puede seguir volviéndose a colocarla en un recipiente de un tamaño más grande que el anterior.
Estas hermosas plantas adoran un sol pleno para prosperar y necesitan al menos 6-7 horas de luz solar directa cada día. Recuerda, cuanto más el sol reciben, mejor.
Zinnias puede tolerar un poco de sombra ligera, pero demasiada sombra conducirá al crecimiento de las piernas y la floración reducida.
Zinnias prosperan en un suelo de drenaje bien que es rico en materia orgánica. Un pH del suelo entre 5.5 y 7.5 es ideal. Estas plantas pueden tolerar una variedad de tipos de suelo, incluidos suelos arenosos o arcillosos, siempre que el suelo no esté compacto y proporcione un buen drenaje.
Una buena mezcla consiste en un compost de una parte, una parte de la capa superficial del suelo y una parte de arena o perlite.
Las zinnias requieren riego regular, pero es importante no sobre el agua, ya que el mismo puede causar varios problemas en la planta.
El suelo debe mantenerse uniformemente húmedo pero no anegado, ya que esto puede causar pudrición de la raíz.
Regar una o dos veces por semana, dependiendo del clima y el nivel de humedad del suelo, es generalmente suficiente. Lo mejor es regar la planta solo cuando la capa superficial se siente un poco seca al tacto.
Zinnias prefieren temperaturas cálidas entre 70 ° F y 85 ° F (21 ° C a 29 ° C Celsius). Las temperaturas de helada o congelación pueden dañar o matar plantas de zinnia.
Le irían bien en humedad regular. Demasiada humedad alrededor de las plantas puede atraer problemas de hongos.
Las plantas de Zinnia se benefician de la fertilización regular, ya que respalda su crecimiento y floración. Ir por una mezcla de líquido 10-10-10 o 5-10-5. Diluirlo a 1/2 de su fuerza y úselo cada 3-4 semanas.
Asegúrese de regar la planta a fondo después de la aplicación para ayudar a los nutrientes a ser absorbidos en el suelo. Además, agregar compost u otra materia orgánica al suelo ayudará a la planta a absorber nutrientes adicionales.
Las plantas de Zinnia pueden verse afectadas por varias plagas, incluidos pulgones, ácaros, trips y moscas blancas. Se puede usar jabón insecticida o aceite de neem para controlar infestaciones menores.
Inspeccionar regularmente las plantas para obtener signos de actividad de plagas y abordar los problemas de inmediato puede ayudar a prevenir el daño generalizado.
Estas plantas también pueden ser susceptibles a diversas enfermedades, que incluyen moho polvoriento, mancha de hoja bacteriana y moho gris.
Snip a las hojas muertas, flores y partes de las plantas de vez en cuando. Además, evite el riego de sobrecarga para prevenir los brotes de enfermedades. Seleccionar cultivares resistentes a las enfermedades y mantener una buena circulación del aire también puede ayudar a prevenir problemas de enfermedades.